Recuerdo la última vez que José González estuvo en Barcelona fue en Razzmatazz 2 con su primera banda Junip. Esa noche fue mágica ya que la música del medio sueco medio argentino evoca paisajes memorables y auroras boreales como poca gente sabe hacerlo. Las seis cuerdas de su triste guitarra deberína ser una asignatura obligatorias para todos aquellos que han sido golpeados por el amor. Mientras esperamos nuevas notícias de su futuro disco, ahora nos llega este adelanto en forma de video. La espera será mucho menos dramática si escucháis sus discos en solitario o si echáis un vistazo al documental The Extraordinary Ordinary Life Of José González.
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