Desde Chicago nos volvieron a visitar este fantástico quinteto multiinstrumentistas. Grandes músicos, control absoluto de los tempos y del sonido, y una sala Apolo, donde las notas, las armonías, no podían escaparse sin pasearse antes por los oídos de los asistentes, entrando en lo mas profundo de su cerebro y abriéndoles la puerta en ese fantástico universo donde solo unos aventajados pueden mostrarnos el camino y Tortoise lo conocen.
Para abrir la noche, L’esperit, si existe alguien que pueda adaptar a la perfección la definición de hombre osquestra y llevarla a un campo poco adaptado para este estilo, como es el rock con notas acidas, este es él. Una muy aceptable apuesta y una sorpresa sonora. Contundente, enérgico, con ganas de gustar y gustó.
Salen al escenario con rigurosa puntualidad, ese lugar donde ellos se muestran a gusto, y empieza el viaje. Sala media llena, pero con asistencia de los fieles al grupo.. Para abrir una muy eléctrica “Prepare your Coffin” dando paso a unos primeros 20 minutos de electricidad, energía y sobretodo “Beacons Of Ancestorship”. Entre canción y canción múltiples intercambios de instrumentos. Bajan la intensidad para recordar que hay unas raíces que jamás debemos olvidar eso quiere decir Jazz, escalas clásicas con sonidos actuales, y sobretodo mucho estilo. Cuando quisieron ganarse por completo al publico, fueron atrás en el tiempo y empezaron a recordar los temas de TNT: “i set my face to the hillside” “ten days intervalo” . Seguidamente algo de Dub. Para desaparecer a la hora exacta del escenario. Volvieron, tocaron y terminaron haciendo bailar al publico asistente con Swung from the gutters”. Fin de concierto , aunque por la sensación final Jeff Parker, él hubiera seguido tocando. Tortoise es de esas bandas que conjuga a la perfección la simbiosis entre disfrutar encima del escenario y hacer disfrutar a los asistentes.
Pablo Trabado@bcnptr
No comments:
Post a Comment
Tu opinión es importante