Limp Bizkit, mi sueño y mi cruz

Yo fui uno de los miles de afectados en aquel fatídico Festimad. Viaje desde mi pueblo Puigcerdà para ver a Fred Durst cuando editaron 'Chocolate Starfish' y me quedé sin verlos. Por el contrario, tuvimos ración doble de Biohazard. En aquella ocasión también pude ver a Slipknot y a Muse, los nuevos Radiohead decían los diarios especializados. Han pasado ya unos años, con polémicas y formaciones distintas, y yo sigo sin haberlos visto en directo. Pecata minuta. Ahora mismo me entero que ya es seguro que no los vea sino es pagando y se me plantea la diatriba de siempre. En tiempos de crisis debo abonar un dinero que podría utilizar como comida para tres días. Seguiré pensando...Es difícil no dejarse llevar por la tentación.